Si tienes una cita pendiente en tu departamento, con tu novio o novia, amigo o amiga, o alguna otra persona y no sabes qué realmente preparar, cómo lucir y qué decir. Aquí te damos los mejores consejos que harán de tu hogar el mejor restaurante de la ciudad.
Conocer a tu invitado
Antes de pensar en qué preparar es necesario conocer bien a nuestro invitado de manera que nada pueda salir mal. Averigua sus gustos, qué frecuenta comer, qué no le gusta, qué lo seduce, cuáles son sus intereses y qué cosas detesta.
De esta forma, no correremos el riesgo de preparar algo que se enfriará en la mesa sin ser probado y, al mismo tiempo, lograremos contar con un ambiente adecuado para que nuestro invitado se sienta realmente a gusto, como si estuviera en un restaurante de cinco estrellas.
Selecciona bien el plato, los ingredientes y verifica la receta
Una vez que ya conozcamos los gustos culinarios de nuestro invitado, damos paso a seleccionar el menú con el que lo esperaremos en nuestro hogar. Si eres de aquellos que no quiere arriesgar a que algo salga mal, lo recomendable es preparar aquel plato que te sea fácil de preparar y se acerque a los gustos de quien vendrá a cenar. Pero si lo que quieres es sorprender y dejar con la boca abierto a tu invitado, anímate y busca alguna receta algo exótica, refinada y que no se frecuente comer todos los días.
Al mismo tiempo, te recomendamos que más que preparar un plato, prepara un menú. Entrada, fondo y postre.
Privilegia la calidad por sobre la cantidad
Si bien en el punto anterior te recomendamos que optes por un menú, por sobre un sólo plato, no necesariamente eso significa que debe haber abundancia. Inclínate por preparar algo que deje espacio para probar lo que viene después. La idea no es quedar exhausto sin poder comer más, incluso recuerda que lo importante, es que la comida pase a segundo plano, mientras el ambiente, la conversación y la compañía, sean el eje principal de la cita.
Termina de cocinar justo cuando llegue nuestra cita
Así es, termina de cocinar cuando llegue nuestra cita o después. Así evitarás probar una comida fría, y además, lo más importante, te podrás lucir y demostrar que eres todo un chef dentro de la cocina.
Genera un ambiente grato
Como señalamos anteriormente, lo importante más allá del menú, es que el ambiente en que recibiremos a nuestra cita sea grato. Una vez que conozcamos los gustos de la persona que cenará con nosotros, procuraremos utilizar una música de fondo que se adecue a sus gustos, mientras que en la mesa, es recomendable tener un lugar limpio y decorado, junto con un sabroso menú al gusto de nuestro invitado.
El vino no puede faltar
Sin duda el vino no puede faltar en la mesa. Si eres de aquellos que no frecuenta a beber, anímate con un poco y verás cómo los sabores de tu comida, junto con la conversación con tu pareja, se pondrá cada vez más interesante.
Prepárate y disfruta
Por último, una vez que tengamos listo nuestro menú, la mesa, el ambiente, la música, y todo lo demás. Es hora de preocuparnos de nosotros. No necesariamente tendrás que aparentar estar vestido para un restaurante de cinco estrellas, pero sí es importante estar aseado, perfumado y acorde a la ocasión, como todo un galán, más aún si nuestro invitado o invitada, se trata de nuestra pareja.
Que no te importe nada más, sirve el vino, pon un poco de música, relájate y disfruta de una buena cena y conversación junto a tu invitado, y ten por seguro que será una ocasión que jamás olvidará.